Rabino Jayme Fucs Bar
En la Hagadá de Pesaj, leemos siempre la historia de los cuatro hijos (Arbaá Banim) con una variedad rica de interpretaciones. Pero en este Pesaj quiero incluir en mi mesa, junto a mi familia y a mis amigos, la historia de las seis hijas (Shesh Banot).
¿Quiénes son esas seis mujeres judías y no judías algo olvidadas en nuestro Séder?
1. Iojéved, madre de Moshé.
2. Shifrá y Puá las dos parteras.
3. Miriam, hermana de Moshé.
4. Bat Paró (Batia), la princesa egipcia hija del Faraón.
5. Tzipora, mujer de Moshé.
Cada una de estas mujeres se nos presentan con personalidades y roles diferentes, exactamente como los «Arbaá Banim» de la Hagadá de Pesaj tradicional. La gran diferencia con ellos es que sin esas seis mujeres, Moshé nunca podría haber llegado a ser el principal libertador y legislador de la historia de la humanidad.
Primero mencionaremos a Iojéved, madre de Moshé y esposa de Amram, que ya tenía dos hijos, Aharón y Miriam, quien contradice el decreto del Faraón que ordenaba «Que cada bebé hebreo de sexo masculino debía ser ahogado en el río…». Iojéved da a luz a Moshé y lo oculta durante tres meses. Ella ama a su hijo y está dispuesta a pagar cualquier precio para salvar su vida.
Iojéved simboliza así, la valentía de una mujer desafiante.
El nacimiento de Moshé, va a estar totalmente relacionado con dos mujeres no israelitas – las parteras Shifrá y Puá, que no cumplieron con la orden de su soberano.
Shifrá y Puá le darán la posibilidad a Iojéved de dejar con vida a su hijo Moshé.
Esto prueba que independientemente de nuestros orígenes, raza o religión, el amor al prójimo y la benevolencia están por encima de decretos y de leyes de tiranos y genocidas.
Shifrá y Puá son el símbolo del amor al prójimo y de la benevolencia.
En esta historia de riesgos y tensiones aparece la joven Miriam, hermana de Moshé, que va a vigilar lo que acontece con la cesta en que se lo depositó, al flotar por el rio Nilo. Miriam se va a preocupar de que el bebé pueda llegar a las manos seguras de la hija del Faraón. Miriam aparece en nuestra historia con un plan preestablecido en donde le va a sugerir a la hija del Faraón que adopte al bebé – Moshé y que sea amamantado por una nodriza de su propio pueblo.
Miriam simboliza el espíritu juvenil y aventurero.
¿Por qué Batia la hija del Faraón va a adoptar al niño sabiendo que es hijo de israelitas? Batia va a criar a Moshé como un príncipe israelita dentro del propio palacio de su padre el Faraón, que tenía planeada la limpieza étnica del pueblo israelita!!!
Batia es la madre adoptiva de Moshé y la que va a criar en casa de su padre a la figura que en un futuro enfrentará al propio soberano de Egipto.
Batia simboliza la comprensión y la fraternidad.
Moshé ya adulto, va a tener que huir de tierras egipcias y esconderse en tierras de Midián. Será allí que va a conocer a su esposa Tzipora, de origen africano, hija del sacerdote midianita Itró. Tzipora concebirá a los dos hijos de Moshé, Gershón y Eliézer. Tzipora, tendrá que abandoar a su pueblo para marchar con Moshé a Egipto y enfrentar muchos riesgos y vicisitudes, entre ellas salvar a Moshé de la ira de Dios, que exige la circunsición de su hijo Gershón, no cumplida por el líder. Tzipora, a diferencia de su marido, entiende que éste está en peligro por no cumplir la voluntad divina y realiza rápidamente la circunsición de su hijo con una afilada piedra.
Tzipora simboliza la fibra con que está curtida y el coraje de una mujer que sabe tomar decisiones en los momentos indicados.
Entonces, en esta noche de Pesaj vamos a recordar también a estas seis mujeres.
Y ahora sabemos… ¡que detrás de cada gran hombre como Moshé hay siempre seis grandes mujeres!
¡Jag Pesaj saméaj!